El fraude alimentario cuesta más de 30.000 millones de euros a la industria mundial, además del grave perjuicio que provoca en la confianza del consumidor y en la reputación del sector.
La presidenta de la Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León (Vitartis), Beatriz Escudero, ha abogado hoy por impulsar la transparencia en las buenas prácticas en materia de seguridad alimentaria y en la lucha contra el fraude, porque “la reputación se construye siendo capaces de trasladar al consumidor lo que realmente hacemos las empresas de alimentación y bebidas de la región”.
“Trabajemos con transparencia y defendamos juntos todo lo bueno que hace la industria de alimentación y bebidas de Castilla y León”, agregó Escudero.
“La confianza —explicó— se ha convertido en uno de los grandes retos de las empresas a la hora de garantizar su legitimidad ante los consumidores”.
Así lo ha indicado durante la celebración de la jornada ‘Fraude Alimentario: concepto y prospectiva de la legislación vigente’, que se ha celebrado esta mañana en la Cámara de Comercio de Valladolid, organizada en colaboración con la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (Fiab) y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. La jornada ha sido clausurada por el viceconsejero de Desarrollo Rural de la Consejería de Agricultura, Jorge Llorente.
El fraude alimentario, recordó la presidenta de Vitartis, cuesta cada año a la industria global más de 30.000 millones de euros, además del grave perjuicio que provoca en la confianza del consumidor y en la reputación del sector.
Por eso, Escudero puso en valor la celebración de este tipo de sesiones de trabajo, que brindan la oportunidad de escuchar a expertos y conocer mejor la legislación vigente y la eficacia de los mecanismos de control en la lucha contra el fraude alimentario.
“Estoy segura de que esto nos ayudará a comunicar con autenticidad y transparencia todo lo bueno que hacemos las empresas de alimentación y bebidas de Castilla y León, un sector estratégico en Castilla y León, ya que soporta buena parte de la cohesión social; es decir, de la sostenibilidad en sus tres vertientes: económica, social y ambiental”.
La jornada contó con la intervención del director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo; el teniente Jefe de Sección de Seprona de Valladolid, Eduardo Ortega; y la jefa de Unidad de Control y Certificación de la Subdirección de Calidad Alimentaria de Itacyl, Saturnina Jiménez.
Además, el senior Manager Assurance Forensic & Integrity Services (EY), Juan Carlos García, presentó el documento ‘Fraude Alimentario: concepto y prospectiva de la legislación vigente’, elaborado por Fiab en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León, Vitartis, se constituyó en 2009 y cuenta en la actualidad con más de cien socios, que concentran el 40% de la facturación y del empleo de la industria agroalimentaria de Castilla y León. La actividad de los socios se desarrolla en los subsectores lácteo, harinas y derivados, frutos secos, azucarero, café (productos solubles), vinos, legumbres y hortalizas, galletería, dietética, alimentos preparados y congelados, conservas (vegetales), cárnico, aditivos, hostelería y restauración, alimentación animal, así como en el sector agroganadero y biotecnología alimentaria. También forman parte de Vitartis las universidades y centros tecnológicos de la Comunidad, lo que convierte a la Asociación en un instrumento de impulso a la conexión entre el mundo de la ciencia y la empresa.